“Negar
a uno sus derechos humanos es negar su humanidad” –Nelson Mandela
Hoy es el 67 aniversario de la entrada en vigor de la Declaración
Universal de Los Derechos Humanos de las Naciones Unidas. Los Derechos Humanos
protegen la igualdad e integridad de los humanos, indistintamente de su
nacionalidad, religión, etnia, sexo, creencias o cualquier otro factor
determinante. Los Derechos Humanos son
innatos e indivisibles.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos garantiza, entre
otros principios: la igualdad ante la ley de todo ciudadano, el derecho a un
juicio justo, el derecho a ser libre de tortura o esclavitud, el derecho a la
presunción de inocencia, el derecho a libertad de expresión y el derecho a la
educación.
Evolución Histórica
“Los derechos de todos los hombres son disminuidos
cuando los derechos de un hombre son amenazados”.-John F. Kennedy.
El marco
institucional de los Derechos Humanos se consolida tras los terribles
genocidios de la segunda guerra mundial. No obstante, la teoría de Derechos
Humanos ha estado latente en el pensamiento de filósofos como Locke y Hegel, ha
sido uno de los principios en la Revolución Francesa, y de la lucha de Gandhi,
Luther King, las mujeres sufragistas y de gran parte de los movimientos
sociales modernos y contemporáneos.
Ámbito Legal y Derecho Internacional
“El derecho es el conjunto de
condiciones que permiten a la libertad de cada uno acomodarse a la libertad de
todos”. - Immanuel Kant
En la
teoría el respeto por los Derechos Humanos está protegido por la Declaración
Universal de Derechos Humanos, Instituciones Internacionales, y el propio
Derecho Constitucional de los Estados democráticos.

No obstante, la falta de un amplio Derecho Internacional vinculante hace
que día a día se produzcan violaciones terribles de la integridad de las
personas en regímenes autoritarios. La creación de Corte Penal Internacional es
un hito en la historia del Derecho Internacional pues ha permitido el juicio y
encarcelamiento de convictos por crímenes de lesa humanidad, crímenes de
guerra, genocidios… Thomas Lubanga, líder armado en la República Democrática
del Congo, fue el primer hombre en ser condenado por crímenes de guerra por el
reclutamiento de niños soldado. La Corte Penal Internacional es uno de los
órganos más fuertes, pero varios de las potencias internacionales como China y EEUU
no han ratificado el tratado de Roma de la CPI, por lo que los crímenes
cometidos en sus países están fuera de su jurisprudencia.
Fortalecer los Derechos Humanos
“La educación de los derechos humanos
es mucho más que una clase en la escuela o el tema de un día; es un proceso
para equiparar a las personas con las herramientas que necesitan para vivir sus
vidas con seguridad y dignidad” –Kofi Annan
A día de
hoy, las ONGs como Amnistía Internacional, Human Rights Watch son los
principales garantes y supervisores de Derechos Humanos, infiltrando zonas de
guerra y abogando por su respeto en regímenes conflictivos.
Los Tribunales
Internacionales son el órgano de futuro que más podrán hacer por los Derechos
Humanos, y paulatinamente lo están haciendo. Para su mayor efectividad haría
falta, indudablemente, que se produjera una cesión de soberanía nacional en
virtud del Derecho Internacional, ya que la falta de cooperación de los
Estados-Nación funciona en detrimento de los Derechos Humanos.
Cabe
destacar que en muchos regímenes autoritarios la propia legislación nacional es
contraria a la Declaración Universal de Derechos Humanos, existiendo una
justicia politizada, censora y represora de libertades. Las Relaciones
Internacionales son clave en la resolución de esta crisis humanitaria, pero la
raíz está en la educación. Una educación universal y despolitizada.
La
educación es la mejor arma de una nación. La mejor arma contra la opresión, y
el cauce de los Derechos Humanos.
Carlota
Núñez Strutt